Vicentin informó que no pagará los salarios de marzo y apunta contra la Justicia

La firma agroexportadora declaró que "no posee los fondos necesarios para abonar sueldos a más de 1.200 empleados". El gremio aceitero advirtió que tomará medidas si se incumplen los compromisos.

La empresa agroexportadora Vicentin SAIC informó oficialmente que no podrá afrontar el pago de los salarios correspondientes al mes de marzo, afectando directamente a más de 1.200 trabajadores. En un comunicado emitido el domingo, la firma atribuyó su situación financiera a decisiones judiciales que, según su interpretación, impiden cumplir con sus obligaciones más básicas.

La notificación a su personal se dio a conocer un día después de que la empresa anunciara un cierre preventivo y la paralización de actividades en las plantas de Ricardone y Avellaneda, justificada como una medida para “proteger los activos esenciales” y facilitar una reactivación futura.

En el mensaje, la firma responsabilizó a la Justicia de Santa Fe, que aún no habilitó la continuidad del concurso de acreedores, lo que —según Vicentin— generó “circunstancias extraordinarias” que dificultan su operatividad. Además, sostuvieron que la incertidumbre judicial provocó el retraso o cese de suministros por parte de clientes, afectando sus operaciones y la posibilidad de afrontar gastos esenciales, como el pago de salarios y compromisos comerciales.

Frente a esta situación, el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) expresó su profunda preocupación, recordando que hace cinco años siguen de cerca la crisis de Vicentin. En un comunicado propio, la Comisión Directiva del gremio aseguró haber mantenido contacto con el juez del concurso y los veedores, y explicó que los sueldos de febrero fueron abonados, aunque el pago de marzo se espera para el martes.

El sindicato advirtió que, en caso de incumplimiento hacia los trabajadores, se tomarán medidas gremiales. Mientras tanto, solicitaron que todo el personal convocado por la empresa se presente a trabajar. “Lo único que nos interesa es el mantenimiento de la fuente de trabajo y de los salarios”, expresaron.

Vicentin finalizó su comunicado lamentando el impacto emocional y económico de la situación, y afirmó que mantiene diálogo permanente con posibles socios estratégicos para buscar una salida. Sin embargo, fuentes del sector aseguran que la firma se encuentra técnicamente quebrada, con deudas multimillonarias incluso con proveedores clave.

La continuidad de las operaciones y el destino de sus empleados siguen envueltos en una grave incertidumbre.